Una masiva actividad de reforestación en el humedal Tromen dio cierre al Programa de Liderazgo Ambiental en La Araucanía, una iniciativa impulsada por la Fundación Pacto Social. Fueron 450 árboles los que se plantaron gracias a la colaboración de diversos actores de la sociedad civil, demostrando que la regeneración de nuestro planeta es posible a través de la voluntad y la colaboración.

Una parte importante de esta iniciativa fue la donación de 250 árboles por parte de CONAF y de otros 200 árboles aportados por la Oficina de Asuntos Indígenas de la Municipalidad de Temuco. Por su parte, la Unidad de Medioambiente de dicho municipio apoyó con la implementación y coordinación del espacio, asegurando que la reforestación se realizara de manera ordenada y eficaz.

El respaldo técnico también fue fundamental. AgroFolilKimun SpA se unió al proyecto, aportando el conocimiento teórico necesario para garantizar una reforestación responsable y sostenible. La comunidad Juan Currin, como anfitriona del evento, participó activamente en cada etapa, mientras que grupos de scouts colaboraron enseñando a los jóvenes la importancia del medioambiente.

Durante el programa, los estudiantes no solo adquirieron conocimientos sobre gestión de proyectos, sino que se transformaron en verdaderos agentes de cambio en su comunidad, trabajando de la mano con la municipalidad, empresas locales, fundaciones, organizaciones civiles, comunidades indígenas y vecinos del sector.

La Fundación KM ofreció charlas sobre conocimientos ancestrales, enriqueciendo la experiencia de los participantes. Además, el CES (Centro de Estudios Sociales) brindó su apoyo para asegurar que el proyecto se desarrollara con responsabilidad, alineado a los objetivos a largo plazo de la comunidad.

El director territorial de la Fundación en La Araucanía, Venancio Coñuepan, indicó que con esta acción “no tan solo plantamos árboles nativos, sino que también plantamos confianza y reconciliación a través de la colaboración”. Por su parte, el estudiante Luciano Henríquez, del Liceo Camilo Henríquez destacó la “belleza de haberse reunido diversos actores en torno al propósito de proteger el medioambiente, y al mismo realzó lo alentador del hecho de observar a personas de distintas edades y generaciones aportando su ‘granito de arena’ en un clima de alegría, trabajo y respeto”.

Los jóvenes, bajo el lema “Somos CARA y damos CARA al cambio climático”, dejaron en alto los principios que transmite el programa de liderazgo ambiental, demostrando que la colaboración puede construir un futuro más sostenible y consciente.